EVENTO CONMEMORATIVO POR EL 8 DE MARZO DÍA DE REIVINDICACIÓN DE LA MUJER

 Entrega de condecoración y acuerdo de felicitación a la labor que realiza el Centro Familia de Familia, y lanzamiento de la Campaña “Yo se mis derechos, no a la violencia intrafamiliar”

 Es un honor para quienes hacemos la Asamblea Nacional y en particular para quien hoy, inmerecidamente realiza este reconocimiento, con ocasión de los actos de conmemoración del 8 de marzo, al trabajo y entrega de una Institución como el Centro Una Familia de Familias que, como las 129 mujeres guerreras de 1908 en New York, buscan mejores condiciones de vida y terminar con la inequidad e injusticia y que entregan con mística y convicción de servicio todo su contingente en favor de los sectores excluidos de la provincia de Pichincha.

 Su creación se remonta al año 1964, como parte de la labor de los Jesuitas en el Ecuador, inicia sus funciones en el centro de Quito, con la asistencia social para brindar alimentación diaria a niños que, producto de las condiciones económicas de sus familias y la falta de oportunidades, era obligados a trabajar en las calles. Bajo el principio de que la educación es el instrumento para vencer las barreras de la inequidad en 1968 se crea y legaliza la escuela primaria Centro del Muchacho Trabajador, con funcionamiento de dos jornadas. Además, se cuenta con la implementación de residencia, atención médica y odontológica. Trabajar con las familias integralmente fue el desafío que 1981 llevó a la misión jesuita ampliar sus servicio y se inaugura la segunda casa del Centro en el sector de Cotocollao en donde se implementan los talleres de formación en confección, belleza y cosmetología, como una parte del programa de educación y capacitación técnica.

A partir del año 2018, la obra continua realizando transformaciones y avances para seguir cubriendo y fortaleciendo el servicio a las familias, por lo que se incluye en la propuesta educativa de la Obra el Bachillerato Técnico Mecanizado y Construcciones Metálicas, conjuntamente con bachillerato en Ciencias. Inicia la ejecución de la nueva propuesta de atención integral desarrollada para el servicio a las familias en situación de vulnerabilidad. En pleno 2020 se implementa nuevos servicios a través de la administración de tres Centros de Desarrollo Infantil gracias a la gestión y concreción de acuerdos y convenios de cooperación interinstitucional con actores públicos y privados que comparten características en cuanto a servicios de atención y promoción social. 

Como no reconocer que actualmente pese al confinamiento y los momentos de la Pandemia ocasionada por la COVID-19, el Centro, en convenio de cooperación interinstitucional con el Banco de Alimentos, se convierte en un punto estratégico para la asistencia a la población del Norte de Quito mediante la entrega Kits de alimentos.

En este año 2022 cumplen 58 de labor continua, transformando la vida de las familias prestando servicios a más 880 personas, avanzando, innovando y formando familias empoderadas que desarrollan sus potencialidades para romper las fronteras de exclusión y lideran procesos de cambio, para construir una sociedad digna.

Reconocer además la implementación de la atención integral en violencia intrafamiliar con la finalidad de aportar a la erradicación de la violencia en todas sus formas con la integración de equipos técnicos en áreas de psicología, trabajo social, salud y promotores sociales que realizan el acompañamiento a las víctimas de violencia intrafamiliar para la restitución de sus derechos.

La historia nos recuerda la lucha de las mujeres obreras que fueron asesinadas e incineradas en la fábrica Cotton, por reclamar mejores salarios, mejores sueldos y condiciones de vida, y su empleador y opresor ordeno cerrar las puertas para que las mujeres desistan de sus luchas que son las nuestras y que nos unen. Esta misma historia nos recuerda que hay instituciones como el Centro Una Familia de Familias que abre sus puertas para transformar la vida de las familias en situación de vulnerabilidad. Que mediante programas integrales y de calidad promueve el empoderamiento de las familias, que bajo el pensamiento de San Ignacio de Loyola han servido con amor.

Por ello este reconocimiento y en ustedes a los cientos de mujeres jefas de familia que luchan por mejores días. Pero, la gestión de estos 58 años de servicio y entrega a la comunidad son producto del trabajo en equipo, del liderazgo de hombres y mujeres que con fe profunda entregan todo en beneficio de los demás.

Por lo que, la Asamblea Nacional también reconoce el trabajo de mujeres como doña ZOILA EVANGELINA CHIN, nacida en el cantón Sigsi, que desde temprana edad enfrento la adversidad con amor y con fe, desafiando a las estructuras existentes de la época y asumiendo el rol de madre para cuidar a sus hermanos, encuentra en el Centro del Muchacho Trabajador y actualmente denominado Centro Familia de Familias, el espacio para el crecimiento espiritual y personal a través de una carrera de servicio a las familias y en particular junto a los niños, niñas y adolescentes que también buscan nuevos derroteros en la Unidad educativa del Centro. En la Zoilita como todos la llaman, se encarna la lucha de cientos de mujeres jefas de hogar que han enfrentado con valentía y humildad un trabajo con capacidad y que no hay barrera que obstaculice los sueños por la construcción de una sociedad más justa. Sus años de trabajo llevan marcados los pasos y las huellas de la sabiduría de las mujeres que transforman vidas y trascienden al infinito en el anonimato y la desmemoria, y que, hoy en ella reconocemos y hacemos justicia a todas las mujeres del campo y la ciudad.

La obra la Compañía de Jesús actualmente se encuentra liderada por un joven que del sacerdocio ha hecho su testimonio de vida, seguidor del pensamiento ignaciano, el P. Gustavo Calderón, Preposito Provincial de la, Obra la Compañía de Jesús, que a través de una visión integradora continua la misión bajo los principios de la fe, y la justicia social, con el trabajo en beneficio de los más necesitados y tomando el pensamiento de Ignacio de Loyola quien nos manifestaba que: “Cuanto el bien es más universal, es más divido”, ha llegado a todos los rincones del territorio ecuatoriano a través de diversos programas sociales como por ejemplo el servicio jesuita para los migrantes, atención a las familias que sufren violencia, creación de semilleros y emprendimientos para mejorar la calidad de vida de las familias de escasos recurso económicos y como no destacar la formación de cientos de niñas, niños, adolescentes y jóvenes que se liberan de la injusticia y opresión a través de la educación. Un sacerdote apasionado, fiel a su principios y votos de servicio a los demás.

El Centro una Familia de Familias, a través de su director Ejecutivo el Eco. Johnny Espinosa, continúa con la transformación y fortalecimiento de la obra de la Campania de Jesús, entender las necesidad y demandas de la colectividad, desde la fe e identidad con los otros y otras ha sido su trayectoria no solo al llegar a liderar el Centro Una Familia de Familias si no durante su apostolado de servicio. Este nuevo momento que vive el Centro es producto de su visión y entrega, llegar a sectores vulnerables como madres jefas de hogar, en el día a día conocer y atender las inquietudes y sueños de cientos de niñas, adolescentes, labrar la tierra y junto a las familias recorrer los huertos y emprendimientos buscando los mecanismos para mejorar los ingresos de familias a través del asesoramiento y acompañamiento a las familias junto a los equipos técnicos, son parte de las acciones que va desarrollando.

Queridos amigos y amigas me faltan tiempo y palabras para describir a tres personas que son un pilar fundamental para destacar el trabajo que realizan en esta noble institución, pido las disculpas debidas pero seguro estoy que la historia os seguirá reconociendo vuestros frutos que junto a hombre y mujeres vienen desarrollando. Sencillo, pero profundo, desde lo humano, este nuestro reconocimiento al Centro Una Familia de Familias.

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